Ser creativo requiere estar 100% presentes en el aquí y el ahora, con una mente desocupada y sin preocupaciones que pueda dedicarse totalmente a pensar.

Una de las competencias que más se demanda en la actualidad a todo tipo de profesionales es la creatividad. 

Un requisito para ser creativos es que tengamos espacio disponible en nuestras mentes. Una mente ocupada nos bloquea y dificulta nuestra capacidad para pensar, analizar y, por supuesto, crear. Analízalo. Trata de recordar esos momentos de tu vida en los que has tenido tu mente más ocupada y pensando mil cosas al tiempo. Seguro que ha sido muy difícil ser productivo y diseñar soluciones innovadoras a las situaciones en las que te encontrabas. 

Piensa cómo los mejores argumentos o soluciones a un problema o a una discusión se nos ocurren cuando nos estamos bañando o después de un momento acalorado. Precisamente se debe a que en los momentos de agitación nuestra mente está tan estresada y ocupada que se le dificulta pensar y ver las situaciones en sus justas dimensiones.

Entonces, si la opción para ser más creativos es desocupar nuestra mente, ¿por qué no lo hacemos? Porque el ritmo de vida actual y hasta la tecnología misma nos han llevado a pensar que debemos estar siempre conectados. Por esto es que paradójicamente, uno de los retos más grandes que todos enfrentamos diariamente es ser capaces de liberar nuestra mente y realmente lograr momentos de desconexión que nos permitan recargarnos, aprovechar los descansos y dejar de pensar. La clave está en lograr que una vez termine nuestra jornada laboral dejemos de pensar en los proyectos que tenemos pendientes, en las reuniones que debemos preparar, en los mensajes que no hemos respondido o en las situaciones que no nos han resuelto. 

Aquí hay algunas maneras de cómo el mindfulness interviene en la creatividad:

• Reducción del Estrés: El mindfulness ayuda a reducir el estrés al centrar la atención en el presente, disminuyendo la rumiación sobre el pasado o la ansiedad sobre el futuro. Un estado mental menos estresado facilita la creatividad al liberar la mente de distracciones negativas.

• Desbloqueo de Perspectivas: Al practicar la atención plena, puedes volverte más consciente de tus pensamientos y patrones mentales. Esto puede ayudar a desbloquear perspectivas rígidas y permitir la exploración de nuevas ideas y enfoques creativos.

• Estímulo de la Observación Detallada: El mindfulness se centra en la observación consciente de los detalles en el entorno y en uno mismo. Esta observación detallada puede inspirar la creatividad al proporcionar nueva información y perspectivas sobre el mundo que te rodea.

• Aumento de la Conciencia Sensorial: La creatividad a menudo se nutre de experiencias sensoriales. Practicar el mindfulness puede aumentar la conciencia de los sentidos, permitiéndote notar olores, sonidos, texturas y detalles visuales que podrías pasar por alto de otra manera.

• Fomento de la Paciencia: La creatividad a veces requiere tiempo y paciencia para desarrollarse. La práctica del mindfulness fomenta la paciencia al aceptar el momento presente tal como es, lo que puede ser beneficioso cuando enfrentas desafíos creativos.

• Aumento de la Resiliencia ante la Crítica: La creatividad a menudo implica la posibilidad de enfrentar críticas y desafíos. El mindfulness puede ayudarte a desarrollar resiliencia emocional, permitiéndote gestionar mejor las críticas y aprender de ellas sin reacciones impulsivas.

• Fomento de la Curiosidad: La actitud fundamental del mindfulness es la curiosidad. Al cultivar la mente curiosa, puedes explorar nuevas ideas, perspectivas y enfoques creativos con una mente abierta y sin prejuicios.

• Mejora de la Concentración: La concentración es crucial para la creatividad. El mindfulness ayuda a mejorar la concentración al entrenar la mente para volver una y otra vez al momento presente, lo que puede ser beneficioso para el proceso creativo.

Al integrar la práctica del mindfulness en tu vida diaria, puedes crear un entorno mental más propicio para la creatividad.